Cocinar: la estufa o cocina, y el horno

Ya sea que le guste preparar cenas elegantes o necesite calentar rápido un plato de sopa, usar la estufa o cocina y el horno con confianza le da muchas opciones.

A veces, perder la visión puede significar perder esa confianza. Las estufas o cocinas y los hornos pueden ser peligrosos y nadie quiere quemarse o causar un accidente. Si desea mantenerse seguro y seguir usando la estufa o cocina y el horno, hay técnicas probadas para cocinar que no requieren el uso de la visión.

Estas técnicas lo mantendrán independiente en la cocina y tendrá opciones a las que está acostumbrado para cocinar.

Hablemos de la estufa o cocina. Si usted es un cocinero experimentado, ya está familiarizado con el diseño de su estufa o cocina. Si está usando una estufa o cocina nueva o no ha cocinado mucho, tómese un tiempo para aprender la ubicación de los quemadores y los controles.

Use el tacto. Verifique que los quemadores estén apagados antes de tocarlos. Es fácil hacer esto alineándose con el borde de la estufa o cocina y extendiendo el brazo sobre los quemadores aproximadamente a la altura de los hombros. Baje el brazo poco a poco y muévalo hacia adelante y atrás para ver si siente calor desde la estufa o cocina. Si no siente calor, los quemadores están apagados y es seguro tocarlos. Cuando esté seguro de la ubicación y el tamaño de los quemadores, puede comenzar a cocinar.

Cuando tiene pérdida de visión, hay preocupaciones importantes de seguridad sobre la estufa o cocina. Asegúrese de que la sartén esté centrada en el quemador, y de que no se mueva. La forma más fácil y segura de centrar la sartén en el quemador es poniéndola cuando el quemador está apagado. Así, puede tocar alrededor del borde de la sartén y del quemador hasta que esté exactamente en el lugar correcto. Entonces estará listo para encender el quemador y comenzar a cocinar.

Recuerde apagar el quemador antes de sacar la sartén cuando la comida esté lista. Para evitar que las sartenes sean desplazadas, o incluso se caigan del quemador, gire todos los mangos de las sartenes para que apunten hacia los lados de la estufa o cocina. Si los mangos apuntan hacia el frente, es posible que le estorben al cocinar. Si la sartén se mueve un poco y está caliente, use una cuchara de madera para centrarla. Con el mango de la cuchara hacia arriba, muévala alrededor del borde de la sartén, manteniendo el contacto entre la sartén y la superficie de la estufa o cocina. Con práctica, podrá usar este truco para alinear la sartén en el lugar correcto.

Hay un tipo de estufa o cocina que es más difícil de usar: la de superficie plana de cerámica o vidrio. Es mucho más difícil sentir si la sartén está centrada o si se ha deslizado del centro. No hay una solución fácil para esto. Lo mejor que puede hacer es usar una vara de medir o una regla. Con el quemador apagado, mida hacia el centro del quemador desde los bordes laterales y frontales de la estufa o cocina. Use esas medidas para alinear el centro de la sartén en el quemador. Sin embargo, una vez que la sartén y el quemador estén calientes, no será seguro volver a hacer esto si la sartén se mueve.

Y finalmente, la seguridad alrededor de la estufa o cocina siempre es más fácil con una buena iluminación. Recuerde: es mejor tener una luz brillante que ilumine solo hacia lo que está haciendo, no hacia sus ojos. Así que revise bien la iluminación. Si tiene una luz fuerte que ilumina la parte superior de la estufa o cocina y no directamente hacia sus ojos y creando resplandor, entonces ya está listo para cocinar de forma segura.

Ahora hablemos de la seguridad del horno. Aquí compartimos algunas reglas básicas para evitar que usted se queme. Las rejillas del horno pueden trabajar por usted. No es necesario que meta las manos hasta el fondo del horno para introducir o sacar la comida. En vez de eso, deslice la rejilla del horno caliente hasta la mitad. Ponga la bandeja o la fuente de hornear en la rejilla y luego empújela hacia adentro. Invierta este proceso cuando saque la comida. De esta manera, no meterá las manos en un espacio oscuro y caliente. Si puede, párese al lado del horno, no al frente.

La mayoría de las puertas de los hornos se abren hacia afuera y hacia abajo, y si se para de frente, debe inclinarse demasiado para mantenerse retirado de la puerta. Si puede pararse al lado y usar la rejilla del horno, estará más alejado de la puerta del horno caliente y no tendrá que inclinarse tanto. Use guantes para el horno. Los paños pequeños resistentes al calor sirven para algunos trabajos, pero no protegen la parte de atrás de las manos, las muñecas ni los antebrazos. Los guantes para el horno sí protegen y facilitan sujetar con fuerza las fuentes de hornear. Incluso hay guantes para el horno extra largos para proteger todo el antebrazo de quemaduras. La lista de recursos en este taller tiene información sobre dónde comprarlos.

Planee con anticipación. Cuando tiene en las manos una fuente caliente con un pastel no es el momento de averiguar dónde lo va a poner en el mostrador de su cocina. Busque un lugar que pueda soportar altas temperaturas y cerca del horno. De esa forma, la transferencia es rápida y fácil.

Ahora, es posible que tenga algunas preguntas sobre cómo configurar la temperatura del horno y también cómo ajustar el calor en los quemadores de la estufa. Hadley tiene un taller sobre estos y otros temas llamado “etiquetas que puede tocar”, o “labels you can touch”, en inglés. Cubre las formas para poder etiquetar los electrodomésticos con marcadores que usted puede palpar para que pueda configurarlos sin depender de su visión. Los chefs profesionales y los cocineros ocasionales saben que la seguridad en la cocina es la clave para cocinar con éxito.

La pérdida de la visión no significa que deba perder la confianza que produce saber que la estufa o cocina y el horno son seguros de usar. Empiece con las técnicas de este taller y estará bien encaminado hacia lograr independencia en la cocina.